Jornada de análisis sobre el Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos, Centroamérica y República Dominicana /

La incapacidad de los políticos tradicionales para traducir la liberalización política y económica en mejoras palpables del bienestar de las mayorías, cuando no su corrupción rampante, han minado la credibilidad en los sistemas de partidos, de por sí ya débiles y poco institucionalizados tras la he...

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Detalles Bibliográficos
Otros Autores: Urcuyo, Carolina; editora, Feoli, Ludovico, Urcuyo, Constantino; editor
Formato: Desconocido
Lenguaje:Spanish
Publicado: Costa Rica : CIAPA,
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Sumario:La incapacidad de los políticos tradicionales para traducir la liberalización política y económica en mejoras palpables del bienestar de las mayorías, cuando no su corrupción rampante, han minado la credibilidad en los sistemas de partidos, de por sí ya débiles y poco institucionalizados tras la herencia del personalismo. En este marco, si es que no ha contribuido directamente, por lo menos ha legitimada do el surgimiento y el uso de nuevas formas de participación democrática directa. La avalancha de reformas constitucionales que han creado en los países del área las figuras de plebiscito, referéndum, iniciativa popular y revocatoria de mandato, y el aumento vertiginoso de su uso, así lo demuestran. Con la adopción del referéndum en el 2002 y su posterior reglamentación, Costa Rica ha entrado en esta corriente. El país ha vivido su propio proceso de desencanto político, caracterizado por el fin del bipartidismo y el desprestigio de la clase política tradicional. El referéndum no es el producto exclusivamente de este proceso, pero su adopción sí encaja en la dinámica de la competencia política derivada de él, la cual produjo una considerable proliferación de derechos y controles ciudadanos. El desenlace de esta proliferación ha sido una suerte de empate entre fuerzas políticas que, aunado a otros factores estructurales propios del sistema ha resultado en su inoperancia ante los asuntos de mayor relevancia política en el país. En este contexto es importante dos razones. Primero en el que se dicha la Ley de regulación del referéndum. La ambivalencia de los legisladores para aprobarla se evidencia en los casi cuatro años que debieron transcurrir, y la orden que debieron recibir de la Sala Constitucional para promulgarla. Esto tendría implicaciones para la calidad de la legislación aprobada. Segundo, es ese contexto el que obliga a inaugurar el referéndumn con la definición de la adhesión del país al Tratado Libre de Comercio con los E.E.U.U., Centroamérica y República Dominicana (TLC).. La incapacidad de resolver el tema por la vía convencional hizo que el referéndum apareciera como la carta de salvación, entregando la decisión al electorado. Sin embargo, ello implicó que la normativa del referéndum se pondri9a a prueba en condiciones de alta polarización política para la definición de un tema que, por sus múltiples facetas y alta complejidad, no era el más apto para ser considerado en un referéndum. En cuanto al proceso se reveló las limitaciones de la normativa y se generó críticas a escala nacional, recogidas por los contribuyentes, las cuáles van desde el señalamiento de la indebida intervención de los medios y del Poder Ejecutivo en el proceso, hasta la ausencia del financiamiento público en las campañas o la falta de regulación de contribuciones privadas a estas. Los contendientes parecieron creer que las carencias de la ley podrían resolverse por Acción del Tribunal Supremo de elecciones pero éste consideró limitado por sus propias atribuciones legales. Esto hizo que algunos sectores reaccionaran negativamente contra el Tribunal. Desde la perspectiva política algunos opinan que el referéndum ayudó al país a doblar la esquina con respecto al modelo de desarrollo imperante desde hacía varios años. En la práctica, el referéndum no ayudó a resolver, y tal vez reafirmó, la polarización y la debilidad de partidos que han venido aquejando al sistema político nacional. Es posible que ayudara a reordenar las piezas del sistema en la medida en que debilitó a los sindicatos y vio emerger a nuevos movimientos sociales. Pero no dio pie a una reconstitución partidaria. Tampoco era esperable que esto surgiera del referéndum. Su principal papel era decidir. Pero como mecanismo de democracia directa, el referéndum también cumplía un papel de profundización democrática para ello se requería que el TSE aprovechara su rango de poder del Estado y su jurisdicción en materia electoral para asegurar la equidad entre las partes de la contienda. En la opinión de la politológa Juany Guzmán, esto no sucedió más bien dejó de ejercer la iniciativa que le correspondía y fue permisivo ante una patente inequidad de las partes en contienda .
Descripción Física:171 páginas
ISBN:9789977473826