El Problema de las tierras en las zonas conflictivas y perspectivas de solución

Se analiza el compromiso de solucionar el problema de la tenencia de la tierra que adquirió el gobierno con la firma del tratado, problema que solucionaría mediante la compra voluntaria al propietario a precios de mercado, las cuales pasarían a los beneficiarios del sector reformado, a un plazo de 3...

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Sumario:Se analiza el compromiso de solucionar el problema de la tenencia de la tierra que adquirió el gobierno con la firma del tratado, problema que solucionaría mediante la compra voluntaria al propietario a precios de mercado, las cuales pasarían a los beneficiarios del sector reformado, a un plazo de 30 años con un interés del 6 por ciento y a precios concertados por las partes, tomando en consideración la calidad de los suelos y otros aspectos. Según los cálculos, si se transfiere por vía del mercado la totalidad de la tierra involucrada o sea terrenos que es necesario comprar, se necesitaría un monto de unos 360 millones de dólares, suma muy superior a la estipulada en el presupuesto del Plan de Reconstrucción Nacional (PRN) que asciende a los 50 millones de dólares, quedando muy por debajo de lo que se necesita en realidad. A todo ello se le debe de sumar los recursos que se requieren para la atención de unos 60 mil nuevos clientes, entre tenedores y propietarios para créditos productivos en las zonas conflictivas, recursos que sobrepasarían los 150 millones de dólares presupuestados por el PRN. La Comisión Especial Agraria (CEA-COPAZ) integrada por representantes de todos los partidos políticos, el FMLN y el gobierno, cumplen las funciones de verificar el inventario, resolver las situaciones conflictivas entre los tenedores y los propietarios y adoptar las medidas necesarias para que se cumpla con lo acordado. El Ministerio de Agricultura y Ganadería no ha tomado las medidas correspondientes con la responsabilidad que le competen la solución de los problemas de la tenencia de la tierra y la producción en las zonas conflictivas, a su vez, el Banco de Tierras debe de readecuar su marco jurídico. Con este panorama, sin la readecuación de la voluntad política y sin la ejecución de los cambios institucionales y económicos, el gobierno no podrá cumplir. MR/OB
Notas:Colección Centroamérica
ISSN:02599864