La Invasión prometida. DE: Este país. Panamá, n. 36,1992
Ahonda en la política exterior de Estados Unidos hacia América Latina y particularmente hacia Panamá, señalando que se quiere mantener la capacidad militar para intervenir en la región cuando sea necesario. Dentro de los objetivos de la política estadounidense se encuentra el planificar y conducir l...
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| Sumario: | Ahonda en la política exterior de Estados Unidos hacia América Latina y particularmente hacia Panamá, señalando que se quiere mantener la capacidad militar para intervenir en la región cuando sea necesario. Dentro de los objetivos de la política estadounidense se encuentra el planificar y conducir la guerra contra el narcotráfico y el narcoterrorismo y a su vez, continuar fortaleciendo la capacidad de las fuerzas armadas latinoamericanas. Si bien es cierto para Estados Unidos la región latinoamericana ha dejado de ser importante en cuanto a su seguridad, sí representa una amenaza latente y presente que lo obliga a mantener los objetivos señalados. Bush y su gobierno predican la desmilitarización en esta época de cambios en donde se ha quedado atrás el conflicto Este-Oeste pero mientras que se disminuyen las tropas y los equipos ligados a la guerra fría, se incrementa la capacidad de Estados Unidos para responder a crisis regionales y un ejemplo claro fue el caso de Panamá. Nancy Dorn, Subsecretaria Adjunta de Defensa señaló que "se trata de la dimensión Norte-Sur de la guerra". Las fuerzas de operaciones especiales que se encargan de la insurgencia y contrainsurgencioa se ha incrementado de 31 mil en 1981 a 44 mil en 1991. Según documentos del Pentágono dados a conocer por el New York Times se prevee para la década de 1990 siete escenarios de potenciales conflictos internacionales, colocando el único escenario latinoamericano en Panamá. Según este documento, ese escenario invitará a una nueva invasión por parte de Estados Undios antes de que finalice el siglo, dicho documento se contrapone a lo manifestado por Richard Cheney cuando reunido con el presidente Endara manifestó la intención de Estados Unidos de cumplir al pie de la letra los acuerdos canaleros de 1977, pero en realidad, indica que el peligro existente de narcotráfico es latente y su país luchará contra él. OB/MR |
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