América Latina: ser o no ser en el contexto de la economía mundial contemporánea /
Históricamente, las relaciones económicas, políticas, culturales o de cualquier otra índole han estado mediatizadas por las ideologías, factores que garantizan el mantenimiento de un status. La dominación de una región o país sobre otro se manifiesta por medio de las diferentes formas de imperialism...
Guardado en:
Autor principal: | |
---|---|
Formato: | Texto |
Materias: | |
Etiquetas: |
Agregar Etiqueta
Sin Etiquetas, Sea el primero en etiquetar este registro!
|
Sumario: | Históricamente, las relaciones económicas, políticas, culturales o de cualquier otra índole han estado mediatizadas por las ideologías, factores que garantizan el mantenimiento de un status. La dominación de una región o país sobre otro se manifiesta por medio de las diferentes formas de imperialismo: colonial, mercantil, financiero y, últimamente, tecnológico e informativo. De tal manera que para analizar las relaciones económicas de América Latina se debe tener presente el aspecto de dominación política e ideológica, de allí que se intenta de alguna manera situar a América Latina dentro de lo que será el nuevo contexto mundial, indicando que en realidad el camino no es nada fácil. El mundo está en una fase de cambios tecnológicos en donde la información juega un papel vital en el desarrollo América Latina deberá luchar fuertemente para no quedar al margen de dicho proceso. Se precisa que la región deberá encontrar su propia identidad socio-histórica, con el fin de hacerse sentir de manera positiva y real en la esfera internacional. A la luz de la economía mundial, se profundiza en la situación de la región en el período de post-guerra, ahondando en las implicaciones e incertidumbres, esto como resultado de las nuevas configuraciones dominantes en el modelo de desarrollo mundial. Luego se analiza el esfuerzo que la región deberá realizar para no quedarse en el camino e integrarse de manera exitosa a la economía mundial. Seguidamente se indica que América Latina se está sumergiendo en la desintegración y que la política de "Las Américas" promovida por G. Bush profundiza dicho proceso de desintegración. Además se indica que el llamado Nuevo Orden no es tal, la situación no ha variado, al contrario, se profundizan las diferencias. Se concluye que el insistente llamado a la integración regional no tendrá acogida, antes bien, lo que se quiere dar es una integración comercial y económica por conveniencia y no por convicción humanística de los países en síntesis es necesaria una verdadera integración regional para que América Latina pueda tener peso a nivel de la economía internacional, de la cual cada vez está más al margen. OB/ALJ |
---|