Las Calles del dolor /

Analiza la problemática social hondureña, la situación de los niños y niñas de la calle: los chapulines, los maras, o como quiera que se les llame no tienen derechos ni consideraciones. Estos son víctimas de sus familias donde reciben maltratos, agresiones, violaciones, hambres y descuido, razones e...

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Autor principal: Long Saborío, Soraya
Formato: Texto
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Sumario:Analiza la problemática social hondureña, la situación de los niños y niñas de la calle: los chapulines, los maras, o como quiera que se les llame no tienen derechos ni consideraciones. Estos son víctimas de sus familias donde reciben maltratos, agresiones, violaciones, hambres y descuido, razones entre muchas por las cuales ellos deambulan por las calles, marginados y excluídos socialmente, lo cual es agravado por las diferentes instituciones estatales. Estos niños centroamericanos sufren golpes, detenciones ilegales, tortura, abuso sexual, secuestros y asesinatos por parte de policías u otros agentes estatales. Pero esto no se da a conocer por los medios de comunicación, como sí se hace con los delitos que ellos cometen. Cuando deciden lanzarse a las calles estos niños lo hacen para huir de sus hogares, allí se sienten más libres, pero la libertad les dura poco, pues son consumidos por la cultura de la calle, lo que los lleva a pedir comida, a realizar pequeños hurtos, prostitución y al consumo de inhalantes. Las autoridades se sienten en libertad de actuar contra ellos sin importar el grado de violencia que puedan ejercer incluso deciden sobre su vida o su muerte. Esto ha generado en Guatemala una lista interminable de niños y niñas torturados solamente en la capital existen más de 200 casos de denuncias, pero en más de cinco años, solamente se han podido concluir menos de diez casos, los otros han sido extraviados o ignorados. En honduras es común ver a niños compartiendo las celdas de las prisiones con adultos, desde luego, con graves consecuencias, ya que son violados y agredidos física y psicológicamente. Los problemas que sufren estos niños se repiten en los diferentes países centroamericanos, la solución dependerá de todos y todas, los ciudadanos debemos exigir a los Estados que cumplan con sus responsablidades, compromisos y brinden soluciones integrales. OB/LOB