La Cumbre de Esquipulas, 7 de agosto de 1987
Un día antes de llevarse a cabo la Cumbre, Estados Unidos presenta un plan de paz para Centroamérica basado en muchos puntos del Plan Arias pero con cambios con respecto a la contra, exigiendo que Managua dialogara en forma directa con ellos y, conteniendo entre otros, los siguientes puntos: el alto...
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Formato: | Texto |
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Sumario: | Un día antes de llevarse a cabo la Cumbre, Estados Unidos presenta un plan de paz para Centroamérica basado en muchos puntos del Plan Arias pero con cambios con respecto a la contra, exigiendo que Managua dialogara en forma directa con ellos y, conteniendo entre otros, los siguientes puntos: el alto al fuego de inmediato, la suspensión de la ayuda militar tanto de Estados Unidos a la contra como de la Unión Soviética y Cuba a Nicaragua, el establecimiento de derechos y libertades constitucionales en Nicaragua y, la organización de elecciones libres en un plazo de 2 meses, un plan de reconciliación y diálogo incluyendo una amnistía para la contra, un plan de ayuda económica y comercial para toda la región e incluso para Nicaragua y, la reactivación de negociaciones entre todas las naciones de Centroamérica que deberían de concluir el 30 de septiembre. Con este plan, Estados Unidos pretendía recuperar la iniciativa en el proceso negociador y obstaculizar las iniciativas de paz de los centroamericanos, fue ésta la conclusión de los observadores internacionales. Por su parte, el New York Times opinó que la propuesta de Reagan era un "estratagema más, que pretendía confundir y dividir a los países". Al elaborar su plan, Reagan dejó de lado a muchos de sus colaboradores cercanos, los cuales se sintieron ofendidos, entre ellos Gaspár Weinberger y Philip Habid, el cual presentó su renuncia. El plan contó desde sus inicios con el apoyo de los demócratas como Jim Wright, Presidente de la cámara de Representantes. Ante la propuesta de plan de Estados Unidos, Ortega contestó inmediatamente e indicó que existían aspectos positivos y que estaban dispuestos a trasladarse a Estados Unidos para discutir directamente, sin embargo, los presidentes asumireron una posición unánime de no incluir el plan Reagan en el orden del día y celebrar la cumbre con la agenda que estaba prevista. OB/MR |
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Notas: | Colección Centroamérica |
ISBN: | 84-87258-07-7 |