El Neoliberalismo es una religión" (entrevista al Ex-Ministro de Planificación, Ottón Solís) /

Ottón Solís, ex-ministro de planificación de la administración Arias Sánchez analiza las consecuencias de la aplicación de las políticas de ajuste estructural en Costa Rica. Entre los efectos negativos indica que han cuadruplicado el déficit en la balanza comercial, incrementado la inflación, se ha...

Descripción completa

Guardado en:
Detalles Bibliográficos
Autor principal: McPhaul, John
Otros Autores: Solís Fallas, Ottón
Formato: Texto
Lenguaje:Spanish
Materias:
Etiquetas: Agregar Etiqueta
Sin Etiquetas, Sea el primero en etiquetar este registro!
Descripción
Sumario:Ottón Solís, ex-ministro de planificación de la administración Arias Sánchez analiza las consecuencias de la aplicación de las políticas de ajuste estructural en Costa Rica. Entre los efectos negativos indica que han cuadruplicado el déficit en la balanza comercial, incrementado la inflación, se ha devaluado el tipo de cambio en un 50 por ciento y se duplicó el déficit fiscal, esto en materia económica. En lo social el salario real se redujo en un 8 por ciento, el gasto en salud y educación disminuyó en un 10 por ciento, la pobreza abarcó al 48 por ciento de la población costarricense, se incrementó la desnutrición infantil en más del 20 por ciento, reaparecieron enfermedades como la malaria y el sarampión. Se dio una concentración de la riqueza tanto en el sector agrícola como en el industrial, el país se endeudó en 280 millones de dólares con el Banco Mundial a causa de los préstamos del programa de ajuste estructural. Solís indica que "La ideología neoliberal es un acto de fe, como lo fue el comunismo en el pasado". Agrega que no es cierto que las ideologías hayan desaparecido como algunos afirman "ha desaparecido el comunismo, pero surgió el neoliberalismo también como una religión". Cuando Calderón llegó al poder, afirmó que la economía del país era un desastre, sin embargo lleva dos años aplicando las mismas políticas neoliberales. Uno de los errores más grandes del neoliberalismo es considerar que la competitividad internacional se logra simplemente reduciendo los impuestos a las importaciones y firmando tratado de libre comercio. Es urgente una verdadera política que parta de la reestructuración económica, que tome en cuenta la eficiencia interna y que se centre en los aspectos de productividad, invirtiendo en ciencia y tecnología para mejorar la productividad, invirtiendo en salud y educación, en modernización agraria, riego, drenaje, reordenamiento agrario, para incrmentar la productividad de la tierra si se lograse todo lo anterior, sí se podría competir a nivel internacional sin subsidios ni exoneraciones, sin salarios deficientes y sin déficit fiscal. Solís indica que el problema es que la clase dirigente ha tomado al neoliberalismo como su ideología y achacan las faltas a otros. OB/ALJ
Notas:Colección Centroamérica