Honduras: divorcio entre ética y política /

Se analiza la situación electoral en Honduras, poco antes de llevarse a cabo las elecciones de noviembre de 1993. Una característica sobresaliente es la indiferencia ciudadana y la lucha cerrada entre los partidos tradicionales, (Liberal y Nacional), por acaparar la preferencia de los electores. Seg...

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Autor principal: Teruel, José Antonio
Otros Autores: Espín, René
Formato: Texto
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Sumario:Se analiza la situación electoral en Honduras, poco antes de llevarse a cabo las elecciones de noviembre de 1993. Una característica sobresaliente es la indiferencia ciudadana y la lucha cerrada entre los partidos tradicionales, (Liberal y Nacional), por acaparar la preferencia de los electores. Según encuestas hay un empate entre el opositor Carlos Roberto Reina del Partido Liberal y Oswaldo Ramos Soto del Partido Nacional. Pero quizás lo que más llama la atención es el alto grado de abstencionismo, que puede llegar al 48 por ciento, lo que se explica por el descontento popular hacia los programas de ajuste estructural aplicados en los últimos años y por la indiferencia de las colectividades políticas frente a la crítica situación en que se encuentran las grandes mayorías, además, por la corrupción en el gobierno y las violaciones a los derechos humanos, todo unido a la forma en que se ha manejado la campaña política, la cual se ha caracterizado por los mutuos insultos y acusaciones entre los candidatos. La Iglesia Católica, por medio de los obispos, hizo un llamado a los candidatos para que dejen atrás los insultos y las mentiras y que expongan un programa sobre la manera en que resolverán los problemas que aquejan a la población. Además de los candidatos tradicionales, hay otros dos que tienen como objetivo romper con el bipartidismo existente en Honduras, pero que en realidad tienen pocas opciones de triunfo. Luego se pasa a analizar a los candidatos tradicionales, de Oswaldo Ramos se afirma que es ultraconservador, inclusive, en algunos círculos se dice que es fascista y que se le víncula con Gustavo Alvarez Martínez, creador de los escuadrones de la muerte, mientras de Carlos Reina ha manejado tesis democráticas, se piensa que con él, los movimientos populares tendrían una mejor relación además, se habla de Olbán Valladares, representante del Partido Innovación y Unidad Social Demócrata, quién plantea una alternativa al modelo de privatización neoliberal y propone que el Estado tenga mayores acciones, y finalmente, Orlando Iliarte del Partido Demócrata Cristiano, confía que obtendrá votos para estar en la cámara legislativa. OB/MR
ISSN:08275564 (Servicio mensual de información y documentación)