Grietas en el cuartel /

Durante tres décadas los militares en Honduras mantuvieron un poder indiscutido y crearon un modelo de sociedad que va mucho más allá de los cuarteles, pero ahora ven cómo surgen grietas en el prolongado tutelaje que obstentaban sobre la sociedad civil, precisamente cuando se comienza a transformar...

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Autor principal: Torres Calderón, Manuel
Formato: Texto
Lenguaje:Spanish
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Descripción
Sumario:Durante tres décadas los militares en Honduras mantuvieron un poder indiscutido y crearon un modelo de sociedad que va mucho más allá de los cuarteles, pero ahora ven cómo surgen grietas en el prolongado tutelaje que obstentaban sobre la sociedad civil, precisamente cuando se comienza a transformar en una burguesía armada que ve en los negocios un nuevo polígono de tiro. Se estima que la posición que los militares tienen no la obtuvieron solamente con méritos propios, sino de la misma sociedad, que en muchas ocasiones se aprovechó de su influencia e impunidad para alcanzar objetivos personales o partidarios. En plena crisis, la sociedad hondureña se asusta al ver los privilegios de que gozan los militares, los cuales se fortalecen en la medida en que los civiles se debilitaban. Posteriormente, se da una síntesis histórica de cómo surgió el ejército profesionalizado en Honduras a inicios de los años 50's con el apoyo de Estados Unidos que buscaba a su vez derrocar a Juan Jacobo Arbenz para 1956 el ejército que estaba dirigido por militares estadounidenses, pasó a ser hondureño y se estrenó con un golpe de estado contra Lozano Días, por un escandaloso fraude electoral desde allí el ejército toma el papel de garente de la constitucionalidad. Para 1957 obtuvieron una ley de autonomía casi total y con ello se volvieron privilegiados ante los demás poderes del Estado luego se le quitó al presidente el nombramiento de calidad en jefe y lo dejó como comandante general, lo que significa que no podía dar órdenes directas a la oficialidad y a los soldados posteriormente el proceso se consolida aún más con el nombramiento del Ministro de Defensa, nombrado por el presidente, pero de una terna de militares escogida por ellos mismos. Pero la posición privilegiada de los militares se vio afectada de forma importante por los cambios en el ámbito internacional la caída del Muro de Berlín y la pacificación de Centroamérica, dejó al ejército sin su tradicional enemigo ideológico, además que su papel tutelar ya no encajaba dentro de la lógica neoliberal. Importantes sectores se mostraron a favor de la desmilitarización de la sociedad hondureña entre ellos el gobierno de Estados Unidos, el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional (FMI) no se pide la total desaparición de las fuerzas armadas, pero sí que se le ponga un límite a su expansión en el campo empresarial y que se ubique por debajo de la ley en vez de pasar sobre ella. OB/LOB
Notas:Colección Centroamérica